lunes, 2 de marzo de 2020

Un fuego azul - Pedro Feijoo


A pesar de que hay en mis estanterías un par de novelas de Pedro Feijoo reconozco que ha no ha sido hasta Un fuego azul cuando me he puesto a leerlo. La verdad es que no sabía que esperar ni del autor ni de la obra. No sabía qué es lo que iba a encontrar. Ahora me arrepiento de no haberle dedicado antes un tiempo a sus novelas.

Y es que desde las primeras páginas Un fuego azul me atrapó. Quizás por la crudeza con la que su autor recrea imágenes en la mente. O quizás motivada por el morbo de querer saber y que me empujaba a leer una y otra y otra página más. El caso es que esta novela, a pesar de no ser excesivamente corta, me ha durado un suspiro. Hacía tiempo que no me gustaba tanto una novela de este género.

Ahora es cuando suelo contar el argumento de la novela y me explayo más o menos según el juego que la misma me proporcione. En este caso voy a ser tan breve que no voy a contar nada. No lo hace la contraportada del libro y no lo voy a hacer yo. De hecho, creo que es mejor llegar a este libro con la menor información de lo que va a ocurrir en su interior. Y no porque no pasen muchas cosas que lo hacen. Hay muertes, muchas muertes, torturas, sangre, vísceras, etc…

Y es que es una novela negra –muy negra-, cruel, durísima, inquietante y que por momentos te hace contener el aliento, leer con la máxima tensión y pensar en esa alusión que se hace en la cubierta a la maldad humana. Dicen que la realidad supera a la ficción, pero ¿será posible en este caso? ¿Hay justificación para ciertas acciones? ¿Existe un mal que supere a otro mayor?

El autor tiene un estilo narrativo conciso, directo y apabullante no se corta un pelo a la hora de describir y ofrecer al lector con todo lujo de detalles las escenas que llegan a perturbar por su brutalidad. Para ello utiliza diferentes narradores que desde diferentes perspectivas nos relatarán sus vivencias. Al principio encontramos escenas inconexas entre sí que nos sitúan frente a diferentes personajes, en diferentes momentos y diferentes circunstancias. A la vez se intercalan vivencias del pasado que son imprescindibles para comprender… Insisto en que no creo que sea deseable saber mucho de la historia para disfrutarla al máximo pero si voy a hablar de uno de los personajes.

El que se está del lado de los buenos y se enfrenta al que probablemente será el mayor horror que se encuentra en su vida. Es el máximo responsable de la Brigada de Investigación Criminal de la comisaría central de Vigo. Ni él ni sus compañeros serán conscientes pero poco a poco verá la magnitud del problema al que se enfrentan. Una mente ¿enferma? ¿perturbada? Pero todo va más allá… Y sí, en algún momento, se verá superado por todo lo que sucede. Tendrán que emplear todas sus fuerzas para cazar al asesino.

Y aunque como lector llega un momento en que parece que comienzas a atar cabos su autor sigue sorprendiendo, va aún más allá y le da la vuelta a la tortilla. Nada es lo que pensamos y cómo lo pensamos. Me ha gustado mucho como el autor construye la novela, sin dar tregua al lector y para ello no necesita un ritmo frenético, pero sí que lo hace manteniendo el suspense y la tensión narrativa, como va complicándose por momentos, como de un tronco principal salen diferentes ramas que aportan interés.

En definitiva, Un fuego azul es un thriller perturbador, macabro, violento y hasta un poco gore. Una novela entretenidísima que vuela entre las manos y que te atrapa desde el principio hasta el fin porque va de más a mucho más (no puedo decir que empiece con suavidad).