miércoles, 27 de marzo de 2019

Los crímenes de Alicia - Guillermo Martínez


Título: Los crímenes de Alicia
Autor: Guillermo Martínez
Publicación: Destino, febrero de 2019
Páginas: 336

La novela de la que hoy os voy a hablar ha resultado ganadora este mismo año del Premio Nadal con una curiosa mezcla. Se trata de una novela negra que usa la figura de Lewis Carrol y su personaje estrella, Alicia en el país de las maravillas, para construir su trama. Alrededor de este archiconocido escritor, cuyo nombre real fue Charles Dogson, siempre ha existido un aura inquietante y misteriosa siendo incluso sospechoso de ciertos crímenes o delitos. Entre ficción y realidad (la parte de los diarios y la hoja encontrada al parecer es un hecho real) construye el argentino Guillermo Martínez esta novela.

La historia se desarrolla en Oxford en el año 1994. Un joven estudiante argentino pasa su segundo año allí disfrutando de una beca que le permite estudiar Lógica matemática. El año anterior había podido conocer a Arthur Seldom, celebre profesor y miembro de la Hermandad Lewis Carroll, y juntos se habían visto involucrados en una serie de crímenes. No ha pasado tanto tiempo pero ahora tendrán que volver a trabajar juntos porque un nuevo e inquietante caso hace pensar que un nuevo criminal anda suelto.

En esta ocasión todo gira en torno a la figura del conocido autor de Alicia en el país de las maravillas. Mientas la Hermandad Lewis Carroll está decida a publicar sus diarios personajes una joven becaria llamada kristen Hill ha encontrado una página que la familia de Carroll arrancó de uno de ellos para que cierta información no viera la luz. Parece ser que podría contener una valiosa y comprometedora información sobre el autor que arrojara luz a su vida y a ciertos comportamientos reprobables que el autor tenía. Pero antes de poder hacer nada la joven es atropellada. Y no parece algo fortuito.  A partir de ese momento comienzan a sucederse las muertes. ¿Qué está ocurriendo?

Esta novela tiene una antecesora titulada Los crímenes de Oxford cuya acción sucede un año antes del punto de partida de esta. A pesar de que comparten personajes la trama no tiene nada que ver con otra y son novelas que desarrollan casos completamente independientes.

Los crímenes de Alicia tiene un planteamiento que me ha parecido muy original. Se trata de una novela negra en la que no solo nos vamos a encontrar suspense e intriga si no también algunas referencias a las matemáticas y la lógica. Quizás este último sea un tema un pelín arriesgado porque no a todo el mundo le puede gustar, interesar o entender. A mí en particular no me estorbado o molestado pero tampoco me ha supuesto un aliciente en la lectura.  

Al final se trata de una novela muy entretenida que además no tiene gran extensión y representa una buena lectura. No solo por su trama que me ha parecido bien construida pesar de contar con elementos tan dispares como el cuento de Alicia, la relación de Carroll con la niña para quien fue escrito y su familia (es lo que más me ha interesado sin duda), que está cargada de interrogantes, ciertos acertijos matemáticos y por supuesto la investigación criminal. Pero además de todo eso logra plantear un dilema moral. Y es que Carroll era aficionado a la fotografía y al parecer más aun a plasmar a las niñas pequeñas desnudas. ¿Desequilibrio o costumbres de una época en la que los roles se desempeñaban en diferentes edades? Habrá un enfrentamiento de posiciones en la novela con respecto a este tema.

El autor hace gala de una prosa muy cuidada y elaborada con un tono que me ha resultado muy formal. Incluso algo excesivo si contamos que se desarrolla a mitad de los noventa. A mí, sin embargo, ciertas expresiones me han llevado a una época más antigua. Es una novela que a pesar de ese estilo que no pretende ligereza, se lee bien y no es difícil entrar en ella aunque al final me ha dejado la sensación de hay párrafos que se alargan demasiado. Es la única pega que le puedo poner.

En definitiva, Los crímenes de Alicia me ha resultado una novela original con aspectos interesantes, con suspense, con una parte más filosófica. Una novela que se nota trabajada y bien pensada.