martes, 9 de diciembre de 2014

Mi rinoceronte también come crepes - Anna Kemp y Sara Ogilvie



Titulo: Mi rinoceronte también come crepes
Autoras: Anna Kemp y Sara Ogilvie
Publicación: Blume, noviembre de 2014
Páginas: 32
Tamaño: 26 x 26 cm
 
Dalia está desayunando cuando un enorme rinoceronte morado entra en la cocina, ¡como si nada! Y entonces da un mordisco a su crepe, ¡como si nada!

Dalia intenta explicárselo a su mamá y a su papá, pero ellos están demasiado ocupados para escucharla. Siempre están demasiado ocupados.

Así pues, Dalia empieza a hablar con el rinoceronte…

Una divertida y conmovedora historia para reflexionar sobre el tiempo de calidad que precisan los más pequeños.

Mis impresiones

No hace mucho que conocí  la existencia de Blume, una editorial comprometida con la calidad de sus publicaciones, el cuidado de sus contenidos, la innovación y el respeto por el medio ambiente. Todos estos aspectos se  notan en el mimo y cuidado que han puesto en la edición de Mi rinoceronte también come crepes, la obra infantil que hoy llega al blog.

Mi rinoceronte también come crepes nos presenta a Dalia, una niña a quien sus padres nunca escuchaban, dijese lo que dijese. Lo mismo ocurrió la mañana en que un enorme rinoceronte de color morado aparece en la cocina de su casa mientras ella desayuna y para su sorpresa se come uno de los crepes.

A pesar de que intentó con todas sus fuerzas explicárselo a sus padres estos estaban demasiado ocupados para hacerla caso. El rinoceronte se instaló en casa y la pequeña comenzó a hablar con él hasta que se convirtieron en buenos amigos. Compartían juegos, risas, canciones… mientras los padres seguían sin darse cuenta de nada.

Pero un día desaparecieron todos los crepes que había para desayunar y entonces….



¿Queréis saber cómo termina esta historia?

La edición está cuidada al máximo y es realmente bonita. El libro es cuadrado y presenta un buen tamaño con pastas duras, manejable pero de forma que resulta muy visual. El texto, a un tamaño y tipografía que facilita la lectura de los más pequeños, representa una historia sencilla, escrita de forma amena, con vocabulario muy asequible, que ellos podrán comprender a la perfección pero que esconde un mensaje para que los adultos nos detengamos un momento a reflexionar.

Llevamos un estilo de vida muy agitado y a veces olvidamos que los más pequeños de la casa necesitan también sentirse valorados, que les escuchemos y nos comuniquemos con ellos. A veces les colmamos de juguetes y posesiones y lo único que necesitan es un poco de nuestro tiempo. También nos transmite el mensaje de que debemos respetar a los animales, que lejos de ser objetos con los que los humanos podamos disfrutar, cada especie tiene un entorno que resulta adecuado para ella.

Las ilustraciones que complementan la historia las iremos encontrando en cada página compartiendo el espacio con el texto que representan. Tienen mucho colorido en tonos mates y difuminados por lo que son alegres y resultan muy divertidas.

Sus dos autoras ya han colaborado juntas en otros proyectos infantiles. Anna Kemp, profesora  de literatura contemporánea en la Universidad de Oxford, ha redactado el texto y las ilustraciones corren a cargo de Sara Ogilvie, dedicada profesionalmente al diseño y la publicidad.

En conclusión, Mi rinoceronte también come crepes contiene una historia sencilla, divertida y bonita en una edición preciosa que gustará mucho tanto a esos primeros lectores que viven sus primeras aventuras con los libros como a los adultos que prefieran disfrutarlos con ellos. Una perfecta alternativa a las típicas historias infantiles. A mi hija, desde luego, le ha encantado y desde que lo tenemos ha sido la lectura de todas las noches antes de irse a dormir.