jueves, 20 de febrero de 2014

El sonido de la vida - Alex George



Título: El sonido de la vida
Autor: Alex George
Publicación: Maeva Bolsillo, noviembre de 2013
Páginas: 444

1904, Hanover, Alemania. Frederick y Jette son una pareja cuyo destino se une cuando ella, que pese a su falta de gracia femenina posee una sensibilidad especial para apreciar una buena melodía, escucha en boca de de Frederick la música de Puccini. Ese mágico encuentro es el inicio de una gran historia de amor y supervivencia de cuatro generaciones de una familia a lo largo del siglo XX.

Cuando Jette se queda embarazada, deciden huir juntos y embarcarse en el primer buque que zarpe hacia el Nuevo Mundo. Una novela épica conmovedora, divertida y universal que, con la música del siglo XX como telón de fondo, plantea la importancia de mantener siempre la esperanza.

Mi experiencia con la novela

Los que pasáis a menudo por aquí conocéis de sobra mi afición a las sagas familiares, uno de los subgéneros que más disfruto en la literatura. Es por ello razonable que El sonido de la vida llamara mi atención de forma inmediata. Aunque también es cierto que había puesto unas expectativas demasiado altas en ella ya que tanto su título como su sinopsis me parecían muy prometedoras. Su lectura me ha resultado muy gratificante y aunque considero que es una novela de calidad notable hay en ella algunos aspectos que en cierto modo me han decepcionado un poco. A pesar de ello la he disfrutado en gran medida y me parece una lectura recomendable.

La historia comienza en Hanover (Alemania) en el año 1904. Frederick y Jette son dos jóvenes que se acaban de conocer mientras pasean por uno de los jardines más conocidos de la ciudad, el Grosse Grate, gracias a una melodía de Puccini que él entona para llamar la atención de ella. Esta canción supone el inicio de lo que será una gran historia de amor no aceptada por los exigentes y elitistas padres de ella, que no ven en Frederick el candidato perfecto que cumpla con sus exigencias sociales y económicas.

Por ello cuando Jette se queda embarazada, temiendo la reacción de sus padres, deciden huir juntos hacia América, tierra de oportunidades, donde asentarse y comenzar una nueva vida. La llegada a su nuevo hogar será el punto de partida donde comiencen las vicisitudes de más de tres generaciones de la familia Meisenheimer en el continente Americano durante más de cien años.

La novela tiene un comienzo espectacular narrando como se produce el encuentro entre Jette y Frederick, una pareja atípica y peculiar, y la forma en que se forja la relación. Él tiene  una sensibilidad especial para la música y ella es una mujer de tamaño enorme con unas cualidades poco femeninas y demasiada lozanía. Y es que esta extraña pareja es capaz de captar por completo el interés del lector a la vez que despierta su simpatía de forma inmediata. Algo que después no ocurre con las siguientes generaciones pues no tienen tanta fuerza y personalidad. Es cierto que los miembros de las siguientes generaciones también son capaces de llegar al lector pero sin duda lo hacen con menor intensidad. A menudo, cuando una novela se desarrolla a través de diferentes personajes que siguiendo el curso natural del tiempo descienden dentro de una misma familia, como en este caso,  se corre el riesgos de que unas figuras eclipsen a otras y esto creo que es lo que me ha sucedido.

En América comenzarán una nueva vida y un proyecto de futuro que no contentará a ambos miembros de la pareja por igual. Mientras uno de ellos es capaz de enraizar de forma inmediata el otro no hace más que añorar la patria perdida.  Y así tanto Frederick y Jette como las siguientes generaciones tendrán que hacer frente tanto a los grandes problemas sociales como a los suyos propios, los cotidianos. Veremos cómo sufren, como trabajan para conseguir el bienestar, como se enamoran, como luchan por salir adelante y como algunos desaparecen de las vidas de los demás mientras estos tendrán que aprender a reponerse.

El sonido de la vida se desarrolla en un pequeño pueblo de Misuri llamado Beatrice a lo largo de más de cien años. En esta novela su autor crea una familia ficticia y la sitúa sobre un contexto histórico real haciendo un repaso por algunos de los acontecimientos más relevantes del siglo XX. En Estados Unidos sus protagonistas vivirán ya sea de primera mano, de forma tangencial o incluso de oídas la primera guerra mundial, el establecimiento de la ley seca en 1920, el Crack del 29, las leyes de segregación racial así como la llegada de Hitler al poder y la declaración de la segunda guerra mundial entre otros. Este es sin duda un punto que me ha parecido muy interesante en la novela.

Esta novela también nos habla del fenómeno de la inmigración desde principios del siglo XX y como los europeos que llegaron hasta América consiguieron establecerse en una tierra muy diferente sin obviar ningún detalle. Desde la primera barrera cultural que supone el idioma hasta otros detalles como la preparación de la comida. Con dos de sus personajes vemos las dos caras de una misma moneda, uno de ellos se adapta completamente pasando a sentirse parte de la nación y el otro no puede olvidar sus raíces y lo que dejó atrás. Pero América en esa época fue un lugar donde todo era posible y la tierra de las nuevas oportunidades.  De hecho el título original de la novela, A good American, hace una clara referencia a este tema.

Una de las cosas que me gustaría destacar es que desde sus primeras páginas somos capaces de discernir la calidad estilística de Alex George. El sonido de la vida supone un relato narrado de forma inteligente, cuidando al máximo los detalles, con un prosa depurada e incluso elegante. La historia está narrada en tercera persona por James, uno de los nietos de Jette y Frederick, que no aparece en persona ni conoceremos su nombre hasta el último tercio de la novela más o menos. Aunque la acción se sucede de forma lineal en ciertos momentos se mueve entre pasado y presente e incluso adelanta acontecimientos para dar forma al relato.

Si en ella los sentimientos como el amor a la familia, la amistad, la lealtad o la persistencia de los ideales tienen una importancia vital también la música ocupa un lugar destacado en la novela como medio para expresar todos esos sentimientos.

La novela se estructura en cuarenta y siete capítulos más un epílogo en los que predomina claramente la narración sobre los diálogos y a pesar de ello, resulta ágil y fluida, manteniendo un buen ritmo a lo largo de su extensión. Quizás en ningún momento, salvo en su final, llegue a sorprendernos los giros que propone el autor ya que su historia conlleva un marcado realismo en el que los acontecimientos que se suceden son lógicos y razonables.

Conclusión

A pesar de algunos pequeños detalles menos positivos que he encontrado en la novela me parece una obra de calidad y digna de ser recomendada, sobre todo a aquellos lectores que disfrutan con este apasionante género. El sonido de la vida es más que una lectura agradable pero a la cual le ha faltado un poco más de emoción y algo de intriga.

Calificación: